Mezcla ortiga con aceite para dolores de huesos y articulaciones. Te sorprenderá el resultado Debo expresar algo para seguir recibiendo mis recetas

Cómo hacer aceite de ortiga infusionado Ingredientes: Hojas de ortiga frescas o secas Un aceite portador (como aceite de oliva o de almendras) Instrucciones: Prepara la ortiga: Si usas hojas de ortiga frescas, lávalas bien para eliminar la suciedad o los insectos. Seca las hojas por completo. Si usas ortiga seca, asegúrate de que no tengan humedad para evitar el crecimiento de moho. Infusiona el aceite: Coloca las hojas de ortiga en un frasco limpio y seco. Cubre las hojas con el aceite portador elegido, asegurándote de que estén completamente sumergidas para evitar que queden bolsas de aire. Sella bien el frasco y colócalo en un lugar cálido y soleado durante 2 o 3 semanas. Esto permite que las propiedades de la ortiga se infundan en el aceite. Agita el frasco suavemente cada dos días para mezclar el contenido.

Cuela el aceite: Después del período de infusión, cuela el aceite a través de una estopilla o un colador de malla fina en otro frasco limpio. Asegúrate de extraer la mayor cantidad posible de aceite de las hojas de ortiga. Desecha las hojas y guarda el aceite en un lugar fresco y oscuro. Cómo usar el aceite de ortiga para el dolor articular Aplicación tópica: Masajea el aceite de ortiga directamente sobre las articulaciones afectadas. El masaje ayuda a mejorar la circulación, mientras que el aceite proporciona beneficios antiinflamatorios.

Úsalo a diario o según sea necesario para aliviar el dolor. Compresa tibia: Remoja una toalla pequeña en el aceite de ortiga tibio y aplícala como compresa sobre las articulaciones doloridas para ayudar a reducir el dolor y la rigidez.