En la era digital, donde el contenido se propaga como un reguero de pólvora, no es de extrañar que un simple acertijo matemático haya conquistado Internet. El acertijo de los 100 dólares, que desafía a los usuarios a calcular cuánto dinero perdió una tienda cuando un ladrón robó un billete de 100 dólares y luego realizó una compra, ha acumulado millones de visitas y ha provocado un intenso debate entre los entusiastas de los acertijos. El acertijo, que fue compartido en X (antes Twitter) por una cuenta llamada Out of Context Human Race, presenta un escenario aparentemente sencillo. Un hombre roba un billete de 100 dólares de la caja registradora de una tienda, luego usa ese mismo billete para comprar productos por un valor de 70 dólares y recibe 30 dólares de cambio. La pregunta entonces es: “¿Cuánto dinero perdió la tienda?”.
A medida que el acertijo ganó fuerza en línea, una multitud de respuestas inundaron la sección de comentarios. Algunas personas afirmaron con confianza que la tienda perdió 100 dólares, mientras que otras argumentaron que la pérdida neta fue en realidad de 130 dólares, teniendo en cuenta los 100 dólares robados y los 30 dólares de cambio. Algunos incluso sugirieron que la pérdida total de la tienda dependía de los márgenes de beneficio de las transacciones individuales. La clave para resolver este acertijo reside en comprender los matices del escenario. Aunque puede parecer intuitivo afirmar simplemente que la tienda perdió 100 dólares debido al robo, la realidad es más compleja. Cuando el ladrón utilizó el billete de 100 dólares robado para hacer una compra, la tienda recuperó efectivamente esos 100 dólares. Sin embargo, la tienda tuvo que dar 30 dólares de cambio, lo que resultó en una pérdida neta de 30 dólares en efectivo. Además, la tienda también perdió los 70 dólares en bienes que adquirió el ladrón. Por lo tanto, la pérdida total para la tienda fue de 30 dólares en efectivo más 70 dólares en mercancía, lo que equivale a una pérdida total de 100 dólares. El acertijo de los 100 dólares es un ejemplo fascinante de cómo un problema aparentemente sencillo puede convertirse en un tema de intenso debate y análisis. Destaca la importancia de considerar cuidadosamente todos los detalles y matices de un escenario determinado, en lugar de confiar en intuiciones inmediatas.