En un incidente desgarrador, la policía descubrió los cuerpos de tres hermanas jóvenes y su madre dentro de su casa de Wolcottville, dejando a la comunidad en estado de shock. Las investigaciones están en curso, mientras que el padre de las niñas, Jonathan Newell, ha hablado sobre la tragedia que ha devastado a su familia. El 17 de septiembre, la policía de Wolcottville fue enviada a una residencia en South Main Street para un control de bienestar después de que surgieran preocupaciones sobre la familia. Al llegar alrededor de las 11:20 a.m., los oficiales hicieron el triste descubrimiento de una mujer y tres niños pequeños, todos fallecidos. Las autoridades entregaron rápidamente el caso a la Policía Estatal de Indiana. Las víctimas fueron identificadas como Rebecca Hughes, de 32 años, y sus hijas, Evalynn, de 8 años, Allison, de 6 años, y Amelia Newell, de 5 años. Las autopsias están en curso, pero los resultados, incluidos los informes toxicológicos, siguen pendientes.
Aunque los detalles de la investigación siguen siendo escasos, la policía ha asegurado al público que no hay peligro inmediato. Mientras tanto, el padre, Jonathan, compartió su dolor, recordando la incertidumbre que sintió antes de conocer la devastadora noticia. Al principio creyó que Rebecca se había escapado con las niñas, pero la realidad resultó ser mucho peor. En una entrevista sincera, Jonathan expresó la complejidad de sus emociones tras la pérdida. Habló de su dedicación a conseguir tiempo con sus hijas, asistiendo a las audiencias judiciales mientras equilibraba tres trabajos. El día de la tragedia, se despertó sobresaltado por una llamada frenética de su madre, pero no fue hasta que notó publicaciones alarmantes en Facebook que se dio cuenta de que algo estaba terriblemente mal. Sus peores temores se confirmaron cuando dos agentes de policía llegaron a su puerta y le dieron la desgarradora noticia. Jonathan admitió sentirse abrumado por oleadas de ira, tristeza y desapego, lidiando con la realidad surrealista de que sus hijas ya no estaban vivas. Mientras el dolor lo consume, Jonathan también enfrenta la culpa, preguntándose si podría haber cambiado algo. “Siento que se me puede echar la culpa a mí de muchas cosas”, dijo, atormentado por la pregunta “¿y si…?” y repitiendo en su mente diferentes escenarios. La pequeña ciudad de Wolcottville se ha visto profundamente afectada por la pérdida, y un memorial improvisado con flores, animales de peluche y sentidas notas apareció afuera de la casa de la familia. Amigos y vecinos, conmocionados por la tragedia, han compartido su dolor. Pam Laughlin, una feligresa, se derrumbó al recordar a las niñas, y el vecino Greg Williams, todavía conmocionado, recordó haber visto a Rebecca unos días antes. La comunidad se ha unido en torno a Jonathan, recaudando más de 45.000 dólares a través de una campaña de GoFundMe para ayudar a dar a sus hijas la despedida que se merecen. Jonathan, conmovido hasta las lágrimas por la gran cantidad de apoyo, expresó su profunda gratitud a todos los que contribuyeron. “Esto es lo último que puedo hacer por ellas”, dijo, reconociendo lo abrumado que se sentía por la amabilidad de los desconocidos. En medio del dolor, una amiga cercana de Rebecca, Ashley McAtee, recurrió a las redes sociales para recordarles a los demás las luchas de Rebecca. Describió a Rebecca como una madre amorosa que probablemente enfrentó batallas mentales y emocionales sin el apoyo suficiente. “Rebecca amaba a sus hijos”, escribió Ashley, animando a las personas a no sacar conclusiones apresuradas. Ahora, Jonathan está utilizando su plataforma para crear conciencia sobre la salud mental, con la esperanza de prevenir tragedias similares. Instó a los padres a buscar ayuda si están luchando. “No sabes cuándo será la última vez que puedas hacerlo”, dijo, destacando la importancia del apoyo de salud mental tanto para los padres como para los niños. Mientras continúa la investigación, la comunidad permanece unida en el dolor y el apoyo a Jonathan, esperando respuestas que puedan ayudar a explicar esta desgarradora pérdida.