El viaje en avión de una mujer se volvió incómodo cuando se negó a ceder su asiento adicional pagado para el niño pequeño de un compañero de viaje. La mujer, que suele reservar un asiento adicional para su comodidad debido a su tamaño, se encontró al lado de una madre y su hijo de 18 meses. La madre le pidió que se apretujara en un asiento para que su hijo pudiera tener el adicional, pero la mujer se negó, explicando que había pagado por los dos asientos.
Una azafata intervino y sugirió a la madre que sostuviera a su hijo en su regazo como lo hacen la mayoría de los niños pequeños. Durante todo el vuelo, la madre hizo que la mujer se sintiera incómoda con miradas sucias y comentarios pasivo-agresivos. Más tarde, la mujer buscó opiniones en Reddit, donde la gente generalmente se puso de su lado. Muchos criticaron a la madre por no comprar un asiento para su hijo y asumir que alguien más renunciaría al suyo. Algunos simpatizaron con el deseo de la madre de un vuelo cómodo, pero señalaron que debería haber priorizado la compra de un asiento para su hijo. En este debate las opiniones varían, pero muchos apoyan a la mujer que pagó por su asiento extra, destacando la importancia de respetar las elecciones y reservas de cada pasajero.