Señales de alerta temprana: La pérdida de peso inexplicable, fatiga continua, cambios en la piel, dificultad para respirar, infecciones frecuentes, problemas digestivos persistentes, dolores de cabeza intensos, cambios de humor bruscos, moretones o sangrados sin causa y hormigueo constante pueden indicar problemas de salud serios. No los ignores; consulta a un médico a tiempo